Blanco garantiza la A-7 para 2012
Economía / Infraestructuras – Granada Económica
PROMESAS RENOVADAS/ EL TITULAR DE FOMENTO, EN SU VISITA A LA COSTA, COMENTÓ EL ESTADO DE LAS INFRAESTRUCTURAS Y RENOVÓ SUS COMPROMISOS CON LA PROVINCIA
Aunque el ministro evita incluir, en su promesa, la finalización del tramo Carchuna-Albuñol en esa fecha
El ministro de Fomento, José Blanco, visitó el dos de febrero Motril, con motivo de la presentación del nuevo remolcador de Salvamento Marítimo. La última visita del mandatario socialista a la Costa granadina se remonta a hace ya más de año y medio. Blanco había anunciado días antes que no respondería a preguntas, aunque si hablaría de las infraestructuras granadinas. En este término, las cuestiones más esperadas eran las referidas a las fechas de finalización de la A-7, la posible llegada del AVE en 2013 y el peligro, por el recorte presupuestario en el Ministerio, de paralización del proyecto de la segunda circunvalación.
Tras el acto del remolcador Sar Mastelero, que ha supuesto una inversión superior a los doce millones y medio de euros, en el puerto motrileño, la comitiva se desplazó a dos tramos de la autovía del Mediterráneo en los que se sigue trabajando, Puntalón-Carchuna, primero, y Lobres-Guadalfeo. El séquito del ministro estuvo compuesto por el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, la delegada de l gobierno andaluz en Granada, María José Sánchez, la secretaria general de los socialistas en la provincia, Teresa Jiménez, y Antonio Martínez Caler, presidente de la Diputación, entre otros asistentes y personalidades.
Autovía del Mediterráneo
Durante la visita a la Costa de Granada, el ministro procuró trasladar la idea de que la A-7 se finalizará en las fechas acordadas, durante 2012. “Un socialista inaugurará la A-7 en 2012. Después de invertir más de mil millones sólo faltaría que la inaugurara Arenas”, declaró el responsable de Fomento. Aprovechó la ocasión para recordar a los presentes que Granada es la provincia donde más se ha invertido en carreteras desde el 2004, y continuó diciendo que “si existe algún retraso es porque el Gobierno anterior, durante ocho años, sólo invirtió 456 millones de euros”. Este hecho y las reiteradas excusas geotécnicas sirvieron al político socialista para concluir esgrimiendo que “hemos tenido que recuperar el tiempo perdido”.
La autovía es “absolutamente prioritaria”, como definió Blanco, y “no se va a ralentizar, pese a los momentos de austeridad económica, como se pone de manifiesto con la reactivación de Puntalón-Carchuna”, aunque procuró recalcar que “las prioridades no están exentas de ajustes presupuestarios”, para continuar esgrimiendo que “si tengo que escoger entre un kilómetro de autovía o garantizar la protección por desempleo a quien no tenga trabajo, me quedo con lo segundo”.
El titular de Fomento evitó referirse al tramo Carchuna-Castell de Ferro, que está descolgado de los presupuestos, paralizado y sin evidencias de mejoría. Vale la pena recordar que solamente hay construído algo más del diez por ciento de la obra en este tramo, por lo que se deberá finalizar el porcentaje restante en algo más de 40 meses que ha presupuestado.
El presidente de la Junta, José Antonio Griñán, también insistió en el carácter prioritario de la A-7 y tildó su terminación como “fundamental”, porque según declaró Griñán la extensión de “la red radial de España no le convenía a Andalucía”, cuando se formaron las autonomías.
