El sector hortofrutícola evalúa las pérdidas en 500 millones de euros

Granada Económica • En portada 

DAÑO ECONÓMICO/ la crisis del pepino

Europa ofrece 210 millones pero desde Andalucía se ven claramente insuficientes para zanjar el asunto 

Desde que la senadora del lander de Hamburgo, Cornelia Prüfer-Storcks, anunció el pasado 26 de mayo, de forma claramente irresponsable, que  los pepinos españoles (fundamentalmente andaluces, de Almería, Granada y Málaga) eran los responsables de la crisis sanitaria de la bacteria E.coli, hasta el momento en que estamos cerrando esta edición, el 11 de junio, han pasado algo más de dos semanas y se ha causado un daño a la agricultura andaluza de más de 500 millones de euros, de los cuales 135 son daños directos al pepino, según la valoración de las principales asociaciones como Coag Andalucía o ASAJA.

La crisis comenzó al realizar análisis de pruebas en cuatro pepinos, entre otras verduras, escogidas aleatoriamente del mercado central de Hamburgo. Tres de los pepinos contaminados resultaron ser de origen español, uno de ellos de cultivo biológico, y el otro de Holanda. Los análisis posteriores demostraron que la bacteria encontrada en los pepinos españoles analizados es diferente a la encontrada en las heces de los afectados, por lo que Hamburgo descartó entones que el origen fuera España. 

Precipitación fatal

Pero para entonces el daño ya estaba hecho. La frialdad de los análisis impidió la reflexión serena que la lógica imponía: ¿Si hay pepinos andaluces en toda Europa, cómo es que los afectados aparecen en un mercado de Hamburgo y no diseminados por todo el viejo continente, empezando por la propia España?  Con tan escaso equipaje acusatorio, la responsable sanitaria del ‘länder’ alemán se precipitó de forma  irresponsable provocando un daño a nuestra economía muy importante, generando una indignación de tal calibre que no son pocos, como COAG Granada, los que piden incluso un boicot contra las cadenas alemanas, como Aldi o Lidl, que excluyeron de sus lineales productos españoles divulgando esta práctica como medio de convencer a sus potenciales clientes.

A día de hoy, el brote, atribuido a la variante más agresiva de la bacteria, la 0104H4, ha causado 31 muertos y más de 3.000 afectados según datos facilitados por el la autoridades europeas. La Escherichia coli o E-coli es una bacteria que se encuentra generalmente en los intestinos de los animales y las personas. Habitualmente es una bacteria inocua, pero esta variedad antes citada produce una potente toxina que daña los glóbulos rojos y los riñones y requiere hospitalización.

La llegada a las verduras de la bacteria ha debido producirse por contaminación cuya fuente original, por tanto, son las vacas o el rumiante que tuviera esa variedad de la bacteria.

Descarte y reacción

Una vez descartada España como origen de la bacteria -ya se sabe que procede de la soja alemana- el pasado 31 de mayo, el sector y las instituciones se afanan en dos prioridades: de una parte en normalizar el mercado cuanto antes y, de otra,  demandar una indemnización que cubra el daño causado, que según las asociaciones de agricultores podría ascender a 500 millones de euros, muy lejos de los 210 millones que ofrece la Unión Europea. En ese sentido UPA Andalucía asegura que urge una campaña publicitaria inmediata que permita recomponer la imagen de las hortalizas andaluzas y ayude al consumidor a recuperar la confianza en nuestros productos. Incluso una empresa de Málaga, Frunet, la mayor productora de  verduras ecológicas de esa provincia, ha decidido demandar a Hamburgo por la crisis.

Por su parte, COAG Granada, además de pedir, como se ha citado anteriormente, el boicot a las cadenas de supermercado alemanas, exigen que la UE deje de tratar “con paños” calientes a Alemania al tiempo que critican que el país germano se salte los protocolos y normativas establecidas, por lo que esta organización agraria confía en que prevalezca el derecho comunitario y  el interés general de los 500 millones de ciudadanos de la UE, frente a los de un país concreto.

ECOHAL Andalucía, que reanuda la entrada y comercialización de pepino, lamenta que “el nivel de pedidos de todos los productos está bajo mínimos, y los de pepino son prácticamente inexistentes”. 

 Desde la delegación de Granada de la Federación Andaluza de Empresas de Cooperativas Agrarias (Faeca) se pide que las ayudas extraordinarias cubran el cien por cien de las pérdidas en todas las producciones hortofrutícolas andaluzas y granadinas afectadas por la crisis alimentaria. 

Para el colectivo, la oferta de la Unión Europea (210 es insuficiente y sólo complementa parcialmente la indemnización prevista en el marco de la Gestión y Prevención de Crisis de la OCM de Frutas y Hortalizas.

Compartir es demostrar interés!