Homenaje del Colegio de Economistas a sus 100 colegiados fundadores

El Colegio de Economistas de Granada ha rendido homenaje a los 100 fundadores de esta institución colegial en un acto durante el cual también se hizo entrega de la Medallas de Plata a los colegiados que han dedicado 25 años de entrega a la profesión y los diplomas a quienes se han colegiado en el último año y que juraron o prometieron actuar y defender la profesión.

El acto, celebrado en la Cámara de Comercio de Granada, contó con la asistencia de José María Escudero, decano del Colegio; Jorge Gavilán Chacón, vicedecano; y Francisco Martín-Recuerda García, decano de Honor. También estuvieron presentes Juan Carlos de Margarida, vicesecretario del Consejo General de Economistas, y Ramón Tamames Gómez, técnico comercial y economista del Estado, que ofreció una conferencia sobre la actual crisis económica y las señales de recuperación.

José María Escudero destacó la labor de los 100 socios fundadores del Colegio: “Fueron un grupo de hombres decididos, que en 1982 dieron el paso de crear nuestra corporación e integrarla totalmente en la vida social de nuestra provincia” y recordó a aquellos que por diferentes motivos no pudieron estar presentes en la celebración. “Queremos agradecer, de corazón, el compromiso, la labor y la colaboración que estos socios tuvieron y tienen con el Colegio”. apostilló.

Figura del economista

Juan Carlos de Margarida, en representación del Consejo General de Economistas, aprovechó su intervención para reflexionar sobre la figura del economista y su implicación con la sociedad. “La crisis económica no nos ha dejado en buen lugar a los economistas; se nos recrimina el no habernos anticipado al desastre, además de la aparente incapacidad para ofrecer soluciones”, expresó Margarida, que calificó estas críticas como “una concepción errónea”. La economía, matizó “no es una ciencia exacta” y achacó a algunos economistas la contribución a la hora de crear una visión equivocada de esta disciplina, dado el “discurso arrogante” de algunos de ellos.

El vicesecretario del Consejo General de Economistas abogó por la figura del economista, a los cuales achacó el deber de “contribuir a un mundo mejor” partiendo de una labor científica en la que tratan con realidades complejas, evidencias parciales, observaciones no representativas, datos incoherentes y limitaciones cognitivas. “Como profesión, somos conscientes del peligro que todo ello representa, razón que nos ha llevado a diseñar sólidas defensas metodológicas como la constatación de diferentes explicaciones de un mismo fenómeno  o la asignación de distintos niveles de confianza a las conclusiones obtenidas de unos datos”. “Nos hallamos –dijo– en una posición privilegiada desde la que contribuir a una sociedad más educada, crítica y libre” y pidió a ésta mayor responsabilidad “para tener las garantías que proporciona una economía social”.

¿Recuperación económica?

También este acto contó con la presencia y al intervención destacada del reconocido economista Ramón Tamames, que habló sobre los índices que hablan de recuperación económica. “Hace dos años y medio que hemos salido de la recesión y el final de la crisis, si lo que buscamos es alcanzar el nivel de PIB de 2007, tras una pérdida del 8,5% de renta, llegará en 2018”. En términos de empleo, para alcanzar una tasa del 7,5% de desempleo, hará falta esperar a 2020.

“Ya hemos pasado la gran recesión y en contraposición con la gran depresión, los datos no han sido tan drásticos. Afortunadamente, ha funcionado mejor la cooperación internacional del G-20, que se ha convertido en el embrión de un orden económico mundial”, dijo. 

Asimismo, hizo referencia al sistema bancario y al hecho de que no se han perdido depósitos durante la crisis “porque no se ha dejado quebrar ninguna entidad”. “Se ha intervenido para garantizar una especie de aseguramiento político”, matizó. 

Sobre la política de austeridad, afirmó ha sido necesario para lograr la consolidación fiscal y reducir el déficit de forma progresiva, reajustando la administración: “Ha sido una consolidación lenta y todavía estamos en ella, con un 4,2% de déficit al que esperamos llegar a final de año”.

“La crisis ha sido dura, pero España con esa velocidad de crucero del 3,3%, es el país que está creciendo más rápidamente en la UE, después del año pasado que ya crecimos un 1,4%”, afirmó Tamames.

De cara al futuro y ante las previsiones de crecimiento del 2,6% que ha dado para España la Comisión Europea, el economista del Estado tomó las palabras del ministro Montoro que dicen que “no hay razón para que el tipo de crecimiento disminuya”, a no ser, dijo, “que nos afecten situaciones con elementos caóticos, como consecuencia de los problemas que tiene el mundo”.

En cuanto a  las razones para la tendencia  a la recuperación, Tamames habló de la mejora del empleo, “a lo que ha contribuido la reforma laboral”. Como consecuencia de la creación de empleo, señaló un aumento de la demanda, a lo que también ha contribuido la caída de los precios de la energía, y sobre todo del petróleo, el gas natural y el carbón.

Otra razón que da para la mejora ha sido el cambio de política del Banco Central Europeo, con la depreciación del tipo al cambio, que ha tenido como consecuencia el crecimiento de las exportaciones.

Tamames se refirió también al crédito para las pequeñas y medianas empresas “que ha vuelto” y reflejo de todos estos indicadores, afirmó “es el descenso de la prima de riesgo”.

En cuanto a lo que aún queda por hacer, el economista señaló el problema del endeudamiento con un 97% del PIB, pero aún así reconoció “que la política económica no ha sido tan desastrosa como algunas han tratado de hacernos ver”.

En un análisis de la situación actual, Ramón Tamames dijo estar convencido de que las cosas “se están haciendo bien”, aunque en su opinión el Estado español puede “mejorar mucho” a través de una reforma de la Administración, señalando especialmente el estado de las autonomías. 

Además, a la pregunta de si realmente estamos cambiando el modelo de crecimiento, respondió con datos: “Mientras en la etapa de Zapatero todo estaba basado en la industria de la construcción, que llegó a representar el 13% del PIB, en 2014 la construcción representó el 6% del PIB, es decir, menos de la mitad que en 2007, año en que los colegios de arquitectos visaron 900.000 nuevas viviendas, frente a las 35.000 del pasado año”. 

La fuerza del crecimiento actual, según Tamames, está en las exportaciones y los servicios, que han crecido hasta representar el 33% del PIB. “Hemos sustituido el motor de la construcción, por un motor de internacionalización, aunque habrá que esperar unos años para ver si ese modelo se mantiene y se confirma”, y habló del retorno de la inversión extranjera, principalmente la procedente de China, y del optimismo como “carburante” del crecimiento.

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