"Tengo el encargo de la Junta para que el metro esté operativo en 2012"

Entrevista a Francisco Ruíz Dávila, director del metro de Granada

La consejera de Obras Públicas y Transportes de Junta de Andalucía, Rosa Aguilar, ha nombrado a Francisco Ruiz Dávila como máximo responsable del metro de Granada. 

 

Ruiz Dávila conoce, desde su etapa de concejal de Urbanismo en el gobierno de José Moratalla, lo difícil que es arrancar un proyecto de esta naturaleza, por su complejidad en todos los sentidos, incluido el político. Ingeniero Agrónomo de formación, la vida política de este granadino siempre estuvo ligada al urbanismo, primero como gerente de EPSA desde 1992 a 1997, posteriormente, entre 1999 y 2003 como teniente de Alcalde del tripartito que lideró José Moratalla y, por último, tras permanecer como concejal socialista en la oposición durante el primer mandato de Torres Hurtado, estuvo algo más de un año al frente del área patrimonial de EPSA antes de que la Junta lo reclamase para esta nueva tarea, en la que se muestra especialmente ilusionado.

¿Con qué ánimo acogió su nombramiento como máximo responsable del metropolitano de Granada?

La palabra es ilusión, fundamentalmente porque creo en el proyecto. Nosotros lo vivimos muy de cerca en el Ayuntamiento de Granada en la época en la que fui concejal de Urbanismo. Recuerdo que hablamos mucho con la Junta del tipo de metro que hacía falta en la ciudad y, por tanto, con el transcurso del tiempo, que el Gobierno andaluz me encargue la gestión es algo que acojo con muchas ganas e ilusión.

Parece que los comercios de la zona no están tan insatisfechos con la obra como cabría esperar…

Concretamente hoy nos hemos encontrado con que algunos comercios del Camino de Ronda nos dan las gracias con carteles en sus escaparates por atender algunas de sus peticiones de cara a esta campaña de Navidad. No ha sido gran cosa lo que hemos hecho, porque se ha tratado de habilitar espacios de carga y descarga que son fundamentales para ellos, generar algunos espacios, abrir nuevos pasillos entre las vallas… En definitiva, pequeñas peticiones que nos habían hecho que para ellos son importantes y para nosotros no ha supuesto gran cosa. Esto nos sirve para hacer una vez más extensiva la idea de participación ciudadana, queremos escuchar a los comerciantes y a los vecinos. El metro va a cambiar la ciudad de arriba a abajo, pero ahora lo que hay son inconvenientes, así que si escuchamos a la gente y ello permite mejorar pequeños detalles y minimizar los efectos de la obra, mucho mejor. Los vecinos y los comerciantes tienen que saber que todo lo que podamos mejorar y corregir para evitar perjuicios lo vamos a hacer.

¿Para cuándo cree que los granadinos podremos utilizar el metro?

Bueno yo tengo un encargo de la consejería para que el metro esté operativo para 2012. Ese es el horizonte. Esta es una obra muy complicada porque, además, en los tramos subterráneos hay muchos imprevistos… en fin es una obra muy compleja pero nuestro reto es el que le he dicho, que en 2012 los ciudadanos puedan estrenar el metro. Para eso me han contratado.

¿Qué le dice a usted que cada vez más alcaldes del Área Metropolitana quieran que el metro llegue a sus municipios?

Creo que Granada en el fondo tiene una cultura de tranvía desde que tuvo una de las principales redes de España y eso está ahí, en la conciencia colectiva. No es un medio nuevo en ese sentido, porque al fin y al cabo es un transporte sobre raíles que nos traen recuerdos de que casi todos los pueblos de la vega una vez estuvieron conectados. No hay que olvidar que es un sistema de transporte limpio, eficiente, sostenible, amable y es normal que las poblaciones que ven que el metro se les acerca pues pidan que se alargue un poco más y llegue a sus municipios.

Económicamente ¿qué va a significar para Granada?

En primer lugar, en la obra hay actualmente 900 trabajadores en la obra. En explotación va a haber unos 150 trabajadores. Pero lo fundamental para la ciudad es que afecta de una manera decisiva a la movilidad y eso creará nuevas centralidades del comercio. Cuando el metro esté funcionando, los comercios que estén cercanos van a notar un ‘tirón’ y las zonas comerciales se van a desplazar porque facilita mucho el acceso. Después, hay aspectos tan importantes como el de la menor contaminación y sus repercusiones en temas como el turismo. Cuando uno va a determinadas ciudades de Europa la gente te muestra orgullosa su metro. La línea 1 no llegará a la hora de punta a punta, pero no hay que olvidar que pocas personas hacen el trayecto completo, la mayoría la harán entre paradas intermedias. Los estudios aseguran que la velocidad comercial será el doble de la del autobús urbano.

Los empresarios de la Mancomunidad de Municipios del Río Monachil, en concreto los de Regamam, piden la llegada del metro por la gran saturación de sus carreteras y por ser una zona de eventos que lo aconsejan. ¿Qué opina de esta petición?

Yo creo que vamos a terminar y a poner en marcha lo que estamos haciendo. Hay que tener en cuenta que es la obra más importante que se está ejecutando por la Junta de Andalucía con 400 millones de euros. Creo que eso es lo primero, empezar a andar y después ver otras posibilidades.

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