Grupo Trevenque, empresa TIC especializada en Inteligencia de Negocio, expone el caso de éxito de Granada La Palma
En un contexto empresarial cada vez más exigente, es inevitable que cualquier compañía se pregunte qué tiene al alcance de la mano para mejorar su negocio. Esta necesidad de tomar decisiones acertadas que sitúen a la empresa en una posición más ventajosa y competitiva, se acentúa en sectores como el hortofrutícola, cuyas características (múltiples actividades productivas basadas en mano de obra, materia prima perecedera y estacional, ajustados márgenes de venta, etc…) hacen más compleja la gestión.
En este punto se sitúa la Inteligencia de Negocio o Business Intelligence, es decir, el conjunto de herramientas tecnológicas que permiten crear conocimiento mediante el análisis de datos existentes. Y dicho conocimiento facilita y mejora las decisiones de la compañía. “Porque si se puede medir, se puede gestionar, y si se puede gestionar, se puede mejorar”, explica Santiago Sánchez, Director de Consultoría de Negocio de Grupo Trevenque, empresa TIC con más de 20 años de experiencia como acompañantes tecnológicos de las empresas, es decir, acercándoles las soluciones que realmente necesitan en cada momento.
Ahora bien, ¿por qué una empresa del sector hortofrutícola debe plantearse la necesidad de aplicar BI en su día a día?
Porque su implantación le permitirá “una gestión más eficaz, obtener respuestas inmediatas a necesidades concretas – pudiendo así tomar decisiones estratégicas más fiables-, la optimización de los procesos y un ahorro de costes y de tiempo”, señala Sánchez, para quien estos beneficios no sólo se van a hacer palpables a largo plazo, sino en “las decisiones que se toman día a día”.
Estas decisiones se apoyan en el conocimiento y la experiencia en el sector, pero también en un gran volumen de datos y parámetros procedentes de múltiples fuentes muy difíciles de gestionar y analizar con perspectiva. Sin olvidar, además, que el cliente o proveedor también está generando de forma paralela una cantidad ingente de datos que pueden influir en nuestra empresa: ventas de producto, descuentos aplicados, stock, pedidos o reservas, etc.
Todo ello “hace indispensable el uso de tecnología fiable, ágil y de bajo coste que permita convertir todos esos datos en conocimiento real del negocio”, apunta Santiago Sánchez, que ejemplifica las ventajas que aporta la tecnología BI a una empresa hortofrutícola respondiendo a preguntas concretas de tres áreas muy importantes:
Producción
¿En qué fincas el destrío está siendo superior a la media? ¿Cuánto me cuesta el kilo de pepino holandés esta campaña? ¿Cómo me afecta cambiar el producto que estoy calibrando por un pedido urgente?
Cadena de suministro
¿Qué debo pedir para el proveedor de plástico para los próximos días? ¿Qué puntos de mejora debo abordar con mi proveedor para ahorrar costes?
Recursos humanos
¿Qué tipo de contrato laboral debo incentivar? ¿Debo pasar a un trabajador indefinido o debo mantenerlo como eventual?
Empresas importantes del sector como Granada La Palma, el mayor exportador del mundo de tomate cherry, ya han confiado en Grupo Trevenque y la tecnología BI. “Cuando iniciamos el primer proyecto con ellos, La Palma era consciente de la necesidad de información pero no sabían hasta qué punto podía ayudarles la Inteligencia de Negocio. A día de hoy es indispensable para ellos”, explica Sánchez. “Sabíamos que podíamos mejorar pero con el volumen de datos que manejábamos, unido a la enorme cantidad de referencias que poseemos, nos impedía tener una visión clara de los puntos de mejora con cada proveedor. Grupo Trevenque y BI nos ha permitido tener toda la información de cada producto en tiempo real y así poder optimizar cada compra”, afirma Domingo Rodríguez, Director de Operaciones de Granada La Palma.
