Una economía al servicio del bienestar de toda Granada

El Ayuntamiento de Granada vive la que posiblemente es la situación más crítica de su historia democrática en cuanto a lo económico. Durante más de 14 años, quienes han estado al frente de este Ayuntamiento han despilfarrado el patrimonio de la ciudad, con una gestión que raya lo irresponsable y en algunos casos, al menos aparentemente, con plena conciencia de sus nocivas consecuencias para varias generaciones de granadinas y granadinos.

Desde el equipo de Gobierno, queremos preparar Granada para superar y aprovechar las oportunidades del siglo XXI en beneficio de toda la ciudadanía. Esto implica, en el ámbito económico, apostar por una economía eficiente y competitiva, que genere empleo, que no ignore el marco global que la desenvuelve y que se encamine a un sistema energético limpio que genere prosperidad de forma incluyente; pensando en la Granada que queremos para el medio y largo plazo: la de la innovación y el desarrollo con medidas que fomenten la cohesión social y la transformación sostenible de nuestra ciudad como vectores de prosperidad, productividad y empleo. Y para ello, el Ayuntamiento debe ser un agente activo y positivo del desarrollo económico y social de nuestra ciudad.

Pero, previamente, es necesario poner en orden las propias cuentas municipales. En este sentido, quien asegura que en un solo año se puede solucionar el desastre presupuestario de quince, no solo miente sino que también es un irresponsable. Por ello, dotar a este Ayuntamiento de un Plan de Saneamiento es una exigencia inaplazable. Un Plan de Saneamiento destinado a la absorción de Remanente Negativo de Tesorería que supera los 60 millones de euros y que está lastrando la posibilidad de tener un Presupuesto en los próximos años y que, por la propia configuración política actual, hace imposible que en dicho Plan ningún partido pueda imponer su programa político.

Por esa razón, las medidas plasmemos deberán contar con el máximo consenso posible y con las aportaciones de todos los grupos políticos. Por parte del Grupo Municipal Socialista ya hemos planteado algunas posibles medidas como liminar los gastos en seguros sanitarios privados para algunos empleados públicos municipales tienen. Y en este caso, no solo por razones económicas, sino también por nuestro firme compromiso con la Sanidad Pública. 

Por otro lado, hemos implementado en los contratos pliegos de condiciones con criterios de eficacia, eficiencia y servicio público. Medidas que parecen lógicas pero que son el ejemplo sangrante de la irresponsabilidad del Partido Popular hasta ahora. Por enumerar algunos ejemplos: para el año 2016 se había presupuestado y licitado el consumo de energía eléctrica en siete millones de euros. Hemos hecho un nuevo pliego de condiciones, lo hemos sacado a contratación pública, han concurrido las empresas y se ha adjudicado por cuatro. Simplemente con cambiar las condiciones del contrato y hacerlo más eficiente, vamos a ahorrar a esta ciudad tres millones de euros.

Y en este sentido, la revisión de los principales contratos públicos municipales pueden generar más de 5 millones de euros en ahorro en los próximos cinco años. 

Igualmente, una racionalización de la organización de los servicios municipales puede generar en un plazo de seis años un ahorro de más de 2 millones de euros en gastos de personal, sin necesidad de reducir la plantilla municipal ni llevar a cabo ningún recorte de los derechos salariales de los empleados públicos municipales. 

El reto es importante, sanear las maltrechas arcas municipales en un tiempo razonable, sin recurrir a una subida desmesurada de la presión fiscal, garantizando la prestación de los servicios municipales con un alto nivel de calidad, mantener el empleo público municipal contando con el acuerdo político del resto de los grupos políticos.

Todo ello, teniendo en cuenta las nuevas realidades a las que nos enfrentamos como ciudad, después de que el mundo haya sufrido una gran crisis financiera internacional. Granada puede tener en un tiempo rel ativamente corto, una sensible mejoría. Creo en mi ciudad, en los granadinos y granadinas, y en la potencialidad que esta cuidad tiene.

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