29 años de Las Yucas con Esencia
Fue en 1988 cuando Josefina Chinchilla y Francisco Leyva levantaron los cimientos de lo que hoy es uno de los complejos de restauración y hostelería más importantes de la provincia granadina. Todo comenzó con la idea de un restaurante en el que degustar las diferentes opciones culinarias de su fundadora, y ese el eje central sobre el que hoy día giran todos los demás servicios del complejo.
La Esencia, el restaurante, mantiene su posición central y, a modo de escenario, en él resurgen ideas espontáneas de fusión y tradición expresadas en su cocina y ambientadas para estimular todos los sentidos. Así es como hoy Víctor Leyva Chinchilla materializa sus altos conocimientos de cocina, su experiencia y el recetario tradicional de su madre.
El restaurante siempre ha formado parte de la cocina tradicional granadina. Por eso, desde que la nueva generación se ha hecho cargo del negocio, La Esencia mantiene como oro en paño un puñado de recetas artesanas incluidas en la carta y que son la mejor herencia que una madre puede dejar a sus hijos. Recetas sencillas, resueltas con elegancia y muy ricas. Hablamos de platos de cuchara, potajes, cocido, bacalao, croquetas… todas esas cosas que no pueden faltar en una dieta semanal mediterránea.
Fusión de ayer y hoy
Cuando los hermanos Victor (chef) y Francisco (jefe de Sala) acabaron sus estudios en la Escuela de Hostelería de Bellamar y La Cónsula en Málaga, decidieron reformar el restaurante pero quisieron conservar la esencia de sus inicios, tal y como su nombre indica, y fusionaron la cocina más tradicional con la más vanguardista. Por eso actualmente la carta se nutre de recetas inolvidables y otras tantas por descubrir, algunas con productos exclusivos de temporada, sugerencias del chef basadas en lo mejor del mercado y en la calidad. Una cocina hecha con mucho mimo en la que se da prioridad al sabor de ayer y de hoy.
