COMUNISMO O CAPITALISMO
Santiago Ibáñez Orozco, economistas colegiado Nº 260 y auditor de cuentas

Hace pocas fechas una joven estudiante de bachillerato, a quien su profesora únicamente le había mostrado los aspectos negativos del capitalismo, me preguntaba sobre las ventajas de una economía capitalista.

Esto me lleva a pensar en dos cuestiones, cada cuál más importante. Uno; ¿Se está inculcando una ideología política en la formación reglada obligatoria? Dos; ¿Esta profesora, y por extensión la sociedad, está valorando adecuadamente las libertades que proporciona la economía de libre mercado?

Por ello, en estas líneas explicaré de forma sucinta las principales características de las economías comunistas y capitalistas:

En un sistema comunista los factores productivos, o los medios de producción, son propiedad del Estado, y es éste quien remunera a los trabajadores y reparte la riqueza a la población en función de las necesidades de la sociedad.

La función del Estado en un sistema íntegramente comunista tendrá un carácter monopolístico, siendo el Estado el único proveedor de servicios, (educación, sanidad, alimentación, transporte, medios de comunicación, etc.) con el consiguiente riesgo de adoctrinamiento de la población, y la evidente restricción de libertades (elegir proveedor, negociar precios, emprendimiento de negocio de forma privada, libertad de información, etc.).

La economía capitalista o de libre mercado se basa en la propiedad privada de los factores productivos (tierra, trabajo, tecnología y capital). Estos factores se relacionan entre sí en condiciones de “libre mercado”, es decir, en condiciones de plena información de los factores y comercio voluntario entre los mismos, con la finalidad de producir bienes o prestar servicios que proporcionen una utilidad para los consumidores. Cada factor recibe la remuneración correspondiente a su aportación a la cadena de valor, distribuyendo así la riqueza entre los distintos agentes del mercado.

Aunque el sistema capitalista atribuye las principales funciones de la economía a la iniciativa privada, el Estado cumple un papel fundamental como garante del cumplimiento de las reglas de mercado, proporcionando seguridad jurídica, seguridad física y orden público a la Sociedad.

En las economías capitalistas actuales el Estado intervendrá en mayor o menor medida en función de la ideología de su gobierno. De esta forma un gobierno liberal intervendrá únicamente para garantizar el cumplimiento de las reglas de mercado, evitar los comportamientos monopolísticos y garantizar los servicios esenciales a la ciudadanía, tales como sanidad, educación e infraestructuras. Un gobierno socialista propondrá mayor intervención y más regulación en distintos sectores, llegando a competir en las actividades mercantiles con entes privados. En consecuencia, mayor intervencionismo requerirá mayor estructura del Estado, mayor gasto público, y por ende mayor presión fiscal para sufragar dicho gasto.

Como conclusión, a esta estudiante de bachillerato le diría que el capitalismo reconoce y recompensa su esfuerzo, su estudio y su trabajo, incentiva la inversión, fomenta el crecimiento económico, y proporciona libertad de elegir y de pensar.

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